Hasta que mi novia y yo nos pusimos a recoger información para comprarnos unas bicis, yo pensaba que estas eran como los ángeles; es decir, que no tenían sexo. Pero después me he enterado de que no, pues resulta que hay bicis macho y bicis hembra.
Al parecer, las bicicletas para mujeres estarían adaptadas a las características de nuestro cuerpo: piernas más largas que las de un hombre de nuestra misma altura, acompañadas de un torso más corto (la primera noticia que tengo), peso extra para la espalda a causa de los pechos (eso ya me lo suponía), hombros más estrechos, caderas más anchas (vale, vale...). Esto hace que haya diferencias en el manillar y el sillín; pero, sobre todo, en el cuadro: si tiene forma de rombo paralelepípedo, la bici es macho; si le falta la parte de arriba o es más baja, la bici es hembra.
Sin embargo, y a pesar de la teoría antropométrica, yo me sigo preguntando... ¿POR QUÉ?
Al parecer, las bicicletas para mujeres estarían adaptadas a las características de nuestro cuerpo: piernas más largas que las de un hombre de nuestra misma altura, acompañadas de un torso más corto (la primera noticia que tengo), peso extra para la espalda a causa de los pechos (eso ya me lo suponía), hombros más estrechos, caderas más anchas (vale, vale...). Esto hace que haya diferencias en el manillar y el sillín; pero, sobre todo, en el cuadro: si tiene forma de rombo paralelepípedo, la bici es macho; si le falta la parte de arriba o es más baja, la bici es hembra.
Sin embargo, y a pesar de la teoría antropométrica, yo me sigo preguntando... ¿POR QUÉ?
Lo que básicamente no entiendo son las diferencias en el cuadro, y, tras varias semanas estrujándome la cabeza, he llegado a la conclusión de que la única causa real es la vestimenta. Para aquellas mujeres que decidan montar en bici con falda, será más cómodo que la parte superior del cuadro no se la levante. Sin embargo, ¿no es también más cómodo para los hombres carecer de esa barra situada peligrosamente cerca de sus genitales? ¿Y si tropiezan y se caen hacia delante...?
En conclusión, ¿qué clase de satán inventó los cuadros con forma de rombo (¿y por qué se llaman cuadros, si son un rombo?), teniendo en cuenta que molestan a todo el mundo?
Por si esto fuera poco, también me he dado cuenta de que, en mi inconsciente, todas las bicis eran macho. ¿Tendrá de esto la culpa el falocentrismo imperante y el sistema patriarcal? Mi respuesta ha de ser necesariamente afirmativa, a tenor de la conversación que, al respecto, tuve hace poco con mi padre:
- ¿Te acuerdas de la bici que tenías cuando eras más pequeña?
- ¿La verde o la azul?
- La verde, la verde... ¡Lo que duró esa bicicleta! Además, era de señorita...
- Yo es que eso de las bicis para hombres y las bicis para mujeres es algo que no entiendo. ¿Tú sabes por qué son distintas?
- ¡¡Pues hija, porque así son las cosas, y ya está!!
Afortunadamente, las bicis que mi novia y yo nos hemos comprado tienen cuadro mixto. ¡Que también existen!
Encantada.
Mixto? Ahhhhh entonces es que las cosas sí van cambiando... ;o)
ResponderEliminarJajaja! Mixto? Siempre tratando de llevar la contraria, yendo contra la corriente y buscando puntos medios, que bien!! ;)
ResponderEliminar¡Holaaa! Esta es la primera vez que comento en este blog, lo llevo leyendo desde hace unos días y de verdad que me encanta, sigue así.
ResponderEliminarCon respecto al tema bicis. Yo siempre las he tenido de esas femeninas y, personalmente, creo que las "masculinas" son peores por lo de la barrita en medio. No solamente por la posible pérdida de descendencia para ellos (Que bueno, si nosotras nos incrustásemos esa barra en lo nuestro... ¡¡Ayy!!), sino porque si tienes que saltar de la bici por cualquier circunstancia, corres el riesgo de engancharte un pie a la barra y despedirte de tu hermosa dentadura natural en el caso de ambos sexos.
Por lo tanto, creo que habría que hacer que las bicis sean de género neutro, pero con el diseño que inicialmente fue concebido para las mujeres.
En fin, besitos de bollito y enhorabuena por el blog.
la mía es macho. las de mujer me daban rabia, básicamente porque a parte de la barra iban con unos colores un tanto feos (rosas, turquesas...). A mí se me ocurre que la diferencia de la barra es por la manera de subir a la bici. Los chicos lo hacen levantando la pata como si se subieran a un caballo. Tiendo a pensar que para que las mujeres no tuviéramos que hacer ese gesto, nada fino para una señorita, nos bajaron la barra de en medio para poder pasar la pierna por delante del sillín sin levantarla tanto. Así que como me dio rabia esa conclusión sexista a la que llegué, me compré una de chico y subo a ella como a un caballo.
ResponderEliminarmi bici siempre ha sido como quien la montaba... no importa cómo o dónde tuviera el cuadro, lo importante era que era roja, con las cintas de mi equipo de fútbol preferido, llevada como el viento sin medir obstáculos o a contrapedal para acompañar a alguna 'amiga' de a pie ;-)
ResponderEliminarpero lo mejor de todo es que no me maté en ella porque dios, ese en el que no creo, ha sido grande...
besos
Las mías son todas de chico, que las de chica, además de que no me gustan nada, me van todas pequeñas.
ResponderEliminarY yo estoy con Nosu, la diferencia en la forma del cuadro es por la forma de subirse (a mi me da igual porque yo me subo en marcha):)